1. After party
Puede ser que tu boda sea por la tarde/noche, en cuyo caso muy seguramente lo primero que vas a querer hacer, será descansar.
¿Pero qué pasa si es por la mañana/tarde? Preveé que tus invitados seguramente querrán buscar un lugar en dónde continuar festejando.
2. Tu equipaje
Llegó el momento de la fiesta y te emociona pensar que muy pronto estarás de viaje con el amor de tu vida. ¿Ya planeaste qué hacer con tu maleta y quién te ayudará a transportarla desde la casa de tus padres hasta el hotel/aeropuerto?
3. Los recuerditos
Para que los recuerditos que quedaron, las pantuflas que no se utilizaron o el centro de tu pastel no se extravíen; designa a alguien de tu confianza que pueda llevarte estos objetos que muy seguramente querrás conservar.
4. Los pequeños detalles
Tal vez prefieras que los programas se entreguen en la entrada de la ceremonia, o te gustaría que el menú esté visible de alguna manera especial. Recuerda debemos planificar estos detalles días antes.
5. Decorar todas las áreas
Aunque la fiesta definitivamente no será en los baños o pasillos, es un buen detalle decorarlos con el mismo esmero con que decoras todas las áreas de tu salón.
6. Confirmar todos los itinerarios
Probablemente los músicos que se encargarán de amenizar tu fiesta, o el chofer de la limo en la que vas a llegar a la ceremonia, ya saben la fecha y hora en que tienen que presentarse. Pero no está de más llamarles una semana antes para confirmar su asistencia. Así evitamos sorpresas, ¿no crees?
7. Organizar tus regalos
Algunos invitados elegirán enviar su regalo directamente a tu casa, pero muchos otros van a llevar su regalo directamente a tu boda ¿Ya sabes qué harás con los regalos cuando la fiesta termine? Es importante planificarlo con antelación.
8. Los proveedores
Tener una lista con los números telefónicos de todo aquél involucrado el día de tu boda. Mantén esa lista a la mano el gran día, te evitará estrés innecesario.
9. Hablar con el sacerdote/juez con anticipación
Puede ser que tu novio o tú tengan un segundo nombre y lo odien. Y casualmente el sacerdote o el juez han decidido llamarlos de esa forma durante la ceremonia. Evita este tipo de sorpresas agendando una reunión previa y háganles saber este tipo de detalles.
10. Kit de emergencia
No está de más llevar un kit que te puede salvar de cualquier imprevisto. Es una buena idea poner cosas como cinta adhesiva, seguritos, pegamento para uñas y hasta aspirinas. Uno nunca sabe.